miércoles, 16 de junio de 2021

TROPEZAR DOS VECES CON EL MISMO PEDRUSCO (2a parte)

Recordáis la primera parte de esta entrada? Pues aquí va la segunda...

Vamos a ver amigas... ¿Quién os dijo que era una buena idea retomar una relación de hace 30 años, que nunca comenzó? A quién os diga que sí, voto porque le hagáis un nudo en la lengua 😛
Generalmente es una muuuy mala idea. Sobre todo si el que te dije no sabe lo que quiere y es un inseguro de la vida (que pienso yo que 50 añitos dan para que ya lo sepa, ¿no?).

Y tú, de repente y, sin comerlo ni beberlo, te encuentras en una situación en la que nunca hubieses pensado estar y piensas... a lo mejor han tenido que passar 30 años para que esto cuajase😍. Un manojo de tortas, eso es lo único que va a cuajar, te lo digo yo😈.

Ahora resulta que tú, no solo le gustabas sino que te encontraba la chica MAS GUAPA de todo el cole. ¡Toma ya! Y, después de varias conversaciones por whatsapp se da de tortas por no habértelo dicho antes, porque no sólo le gustas como cuando erais adolescentes sino que LE ENCANTAS todavía más y cree que eres la mujer de su vida y que  todo le hubiese ido mejor si hubiese estado contigo. ¡Toma ya muchas veces más!💏

Ahora es cuando tú, que ya has vivido lo tuyo y ya no te encandila un culo, así como así, le tendrías que decir: ¡Qué mala suerte chico! Si esto me lo hubieses dicho ayer...😔

Pero qué haces de verdad? Pues todo lo contrario chica... te revolotean dos o tres mariposas por el estómago (que ya te podían haber dado ganas de vomitar, la verdad) y la cagas. Si guapa, la cagas hasta el corbejón.

A partir de aquí os enviáis whatsapps, alguna llamadita, te dice lo sexy que es tu voz, que estas igual de guapa que cuando tenías 16 años (un cumplido falso y usado pero que todavía les funciona) y caes y sigues cayendo hasta que unas semanas después te das la gran hostia (y, encima, sin bendecir).

Necesita verte y lo necesita ya. No puede esperar. Y tú, que eres cándida como algodón de azúcar, aceptas la cita y piensas... bueno, una copa, puede que una cena, cuatro batallitas y para casa. Pero no cuentas con el beso que te planta en la boca cuando acabáis de cenar, que hace que te de vueltas la cabeza (no porque sea un experto besador, para nada, sino porque llevas esperando ese beso desde los 16). Aaggg!!!!

Claro que tampoco cuentas con que prefiere irse para casa (porque no es nocturno sino diurno 😲¡hay que joderse!) en lugar de quedarse contigo un rato o acompañarte a casa. Que piensas... bueno, hace tiempo que no ligaba pero... ¿tanto han cambiado las cosas? Puede que sí y tú te has quedado en la época medieval.

La cuestión es que, de repente, no dejas de pensar en él: ¿guapo? Bueno, más bien no... pero tiene su aquél. ¿Divertido? Bueno, más bien no... pero según se mire. ¿Seguro de sí mismo? ¡Auch! Va a ser que no pero chica... Vamos a ver nena... ¿Qué tiene este tío para encandilarte, si es que puede saberse? Pues no sé... en realidad nada pero eso, tú, todavía no lo sabes😂

CONTINUARÀ...

sábado, 5 de junio de 2021

TROPEZAR DOS VECES CON EL MISMO PEDRUSCO (1a parte)

Imaginaos la situación bajo una perspectiva femenina: chico, chica, colegio, adolescencia... Salvo excepciones, por lo general, nada bueno saldrá de ahí. 

A los 13 años, tú estás colada por él y él está en la inopia (NORMAL)

A los 15 tú sigues colada por él 💘(las mujeres somos demasiado fieles a nuestros sentimientos) pero él comienza a salir con otra más guapa, más lanzada y más alta que tu y a ti parece que se te haya muerto un pariente pero, por aquello de que la vida sigue, acabas medio saliendo con otro chico. No es lo mismo pero, a falta de pan...

A los 16 sigues idiotizada por sus ojos, su pelo, su culo... (si, entonces, con 16 años también nos iban los culos y, sobre todo, lo masoquista. Todas sabemos que, cuanto más te ignora un chico, a ti más te gusta) pero por desgracia, para él eres transparente. Ha dejado de salir con la chica alta, guapa y lanzada pero sigue sin hacerte ni puto caso. 

Haces de todo para que te note (te vistes diferente, te cortas el pelo, te maquillas,...), pero, aparte de una bronca de tu madre en plan "vuelve a dejar la puerta como estaba", ni por esas. Entonces se te ocurre la brillantísima idea (no te culpes, en el momento en el que se te ocurrió pensaste que era brillante) de escribirle una declaración de amor por escrito 📜(a ver si así se entera). Pero, ¡qué es lo peor que puede hacer una chica de 16 años que le escribe una carta de amor a un chico de 16 años? ¡DARSELA! 

Porque pueden pasar tres cosas:  
1. Que se lo pase teta explicándole a sus amigotes lo colada que estás por él y que los amigotes se cachondeen de tí hasta el infinito y más allá.
2. Que se dé cuenta de que tú también le gustas y haga algo para demostrártelo.
3. Que se dé cuenta de que tú también le gustas pero prefiera pasárselo teta explicándole a sus amigotes lo colada que estás por él y que los amigotes se cachondeen de tí hasta el infinito y más allá.  

Por regla general, y por desgracia para ti, la respuesta correcta es la tercera. ¡Son así de maduros! Y si encima, tu amor platónico te escribe una respuesta diciendo que le gustas pero que se ha enterado que también te gusta otro y no se quiere entrometer (cuando el cabrito sabe que no es cierto) ya rizas el rizo. 

En este punto tienes que agradecer el tener buenos 👦👧que te convencen de que el capullo se está 😂😂 de ti y que ni se te ocurra darle más explicaciones (porque tú ya estabas dispuesta a escribirle una respuesta a la respuesta, jurándole que, en tu corazón y tus pensamientos solo existe él). ¡¡Serás gilipichi!!! 

Pero claro, para ti eso no es suficiente para enviarlo por donde amargan los pepinos. ¡Qué va! Tú sigues de masoca por la vida, sufriendo cada vez que él está cerca de una chica que no eres tú y haciendo ver que las pullas de él y sus amigos por la dichosa cartita no te afectan en lo más mínimo, aunque por dentro te mueras de pena. 

Por supuesto, el final de esta historia es una chica con el corazón roto💔, un chico con dos corazones 💕(el suyo y el tuyo), muchas  😭😭 y 30 años de distancia. 


CONTINUARÀ...